Rincones para los niños en el jardín

1-Uno de los grandes clásicos de un jardín que se precie no puede ser otro que una guarida, ya sea en forma de tienda india o tienda de campaña, dependiendo de la edad del niño. En cualquiera de los casos, este estará encantado de tener una ubicación secreta que poder llenar de cómodos almohadones sobre los que leer sus aventuras favoritas o, simplemente, soñarlas o imaginarlas. 

2-Una idea genial que, además, nos reportará una mayor tranquilidad a la hora de ir caminando por casa, es la de crear un espacio en el jardín en el que concentrar todos esos juguetes que encontramos esparcidos por aquí y por allá. Al concebir este lugar como exclusivamente suyo, es probable que el niño tienda hacia una mayor responsabilidad sobre sus juguetes y, de esta forma, los ordene allí debidamente. Lo que está claro es que ya no estarían dejados en los diversos rincones de nuestro hogar. Para ello, basta con disponer un cajón de tamaño considerable lleno de arena (si es de playa, obviamente mejor). Este arenero infantil puede ser creado fácilmente mediante palets, o bien simplemente aprovechando el generoso espacio de una cubierta de rueda de camión o tractor. O más fácil aún: utilizando para ello una piscina hinchable. Con cualquiera de estos Poofunstore consejos lograremos un perfecto rincón delimitado en el jardín para las aventuras de los juguetes de nuestros peques. 

3- Si de lo que se trata simplemente es de echar una buena siesta o de relajarse un ratito al compás de la natural melodía de nuestro jardín, viendo cómo pasan las nubes y la pequeña gran fauna del lugar, tan sencillo como colocar una colchoneta sobre un palet junto al árbol cuya ubicación sea la más idónea. Una mosquitera cubriendo correctamente el espacio completará un rincón de ensueño.

4-Siguiendo en la misma línea de descanso y relajación, no podíamos olvidar la idea de la hamaca de tela o balancín sostenido por un árbol. Este podría ser perfectamente el palet y colchoneta armados en el punto anterior. Por supuesto, repasaremos punto por punto la madera para asegurarnos de que está libre de astillas. Para que la seguridad sea total, lo recomendable es colgar nuestro balancín mediante unas cadenas, además de no hacerlo a demasiada altura, también para que los peques puedan subirse sin problema alguno.

5-Volviendo a la actividad, concretamente a la intelectual, ¿qué tal si dejamos que los niños pinten o escriban todo lo que quieran sin temor a mancha alguna en los rincones de casa? Una pizarra colocada en el tronco de un árbol o sobre cualquier muro del jardín y un paquete de tizas darán necesaria rienda suelta a su imaginación. Podrán jugar a ser ellos mismos sus maestros e incluso, por qué no, repasar ese contenido de alguna materia del colegio que, seguramente, se les atraganta. De paso, asimismo, descubrirán cuáles eran los materiales escolares con los que contaban sus papás, apreciando y valorando de esta forma la diferencia con respecto a los suyos. 

6-Finalmente, y como colofón a estos Poolfunstore consejos, nos atrevemos a sugerirte la creación de todo un parque de aventuras. Pocas cosas puede desear más un niño que tener su propio parque de aventuras en el mismo jardín de casa. Seguramente suene a demasiada complejidad, pero en realidad es bastante más fácil de lo que su nombre hace que imaginemos. Solo hay que pensar en sencillos columpios colgados de los árboles, en camas elásticas (que están a la orden del día y, por tanto, pueden adquirirse fácilmente), en redes enganchadas a los árboles para escalar o en artesanales laberintos hechos a base de cartón. ¡Seguro que se te ocurren más ideas!