La poda: Sus beneficios

Podar es un proceso de renovación y cambio en los árboles y plantas. En ciertas ocasiones, los cambios climáticos hace que la propia naturaleza se encargue de podarlos de manera natural para poder continuar con su evolución. No obstante, son numerosas las especies que no viven dentro de su entorno natural y tiene que ser el hombre quien realice esta poda para conseguir un correcto desarrollo. 

La poda es necesaria a la hora de reforzar la salud y la belleza de las plantas además de permitirnos realizar cambios durante su crecimiento. De esta manera en los árboles frutales puede contribuir a que sus ramas consigan más aire y luz con lo que se mejora la producción de sus frutos.

Por otro lado, en pequeñas plantas se consigue estimular su anchura para obtener más volumen. En general, el objetivo de cualquier poda es quitar una parte determinada de la planta o árbol para que otras partes crezcan mejor y más rápidas. Por esto también es muy importante abonar de manera regular, especialmente después de podar.

Lo habitual es podar en otoñoya que los árboles están inactivos en esta época. De esta manera al llegar la primavera crecerán con más potencia y estarán preparados para dar sus mejores frutos.

Por otro lado las plantas que florecen durante la primavera, tienen que ser podadas al finalizar dicha estación o a principios de verano. Gracias al brillo del sol, se recuperarán más fácilmente del estrés sufrido durante la poda.

Si la planta tiene plagas o está deteriorada, es mejor podarla aunque sea en una época distinta a las mencionadas, siendo recomendable en cualquier caso, no hacerlo ni cuando hace demasiado calor, ni cuando el frío es extremo.

Lo primero que hay que hacer es observar las plantas, los árboles y por supuesto, sus ramas. Es fundamental cortar aquellas zonas que están muertas para que vuelvan a crecer con salud. Si no se sabe cuando están vivas o muertas, habrá que comprobar si se astillan de manera fácil. Si es así, están secas y por consiguiente muertas. Si están flexibles y verdes, entonces es que están vivas.

Una vez tengas claro lo que hay que cortar, recuerda hacer cada uno de los cortes donde las ramas puedan volver a crecer, es decir, en la intersección del tronco o de una a rama padre, y dejando un tocón pequeño. Si la rama es muy pesada, es mejor comenzar a cortar por la parte baja y después continuar por la zona superior para completar la acción.

Ten en cuenta que los nodos de las hojas se cortan durante la primavera, el verano y el otoño y solamente por encima de los brotes. Si haces un corte en una rama por la mitad, la misma no va a volver a crecer y por ende, puede sufrir una infección. Si notas que el árbol o planta está demasiado denso, corta ramas interiores y horizontales para poder airear y permitir que entre la luz del sol a su interior.

Por supuesto, si lo consideras necesario, además de seguir los PoolFun consejos que te ofrecemos, solicita la ayuda de un profesional para llevar a cabo la poda necesaria, y encuentra todo lo que necesitas para el cuidado de tu jardín de la mano de nuestros expertos.